Información de los principales ingredientes:

Para mantener las células del cuerpo sanas y jóvenes es necesario aportarles los elementos nutricionales fundamentales para su óptima regeneración, misma que mejora de manera notable la microcirculación.

Los problemas de microcirculación provocan que se acelere el envejecimiento de las células, causando problemas de funcionamiento de órganos, afectaciones a la piel o alteraciones en el estado anímico. Los síntomas más frecuentes que nos alertan de una microcirculación deficiente son:

Dificultad para concentrase.

Problemas de memoria.

Mareos.

Irritabilidad.

Extremidades frías.

Falta de vitalidad o cansancio frecuente.

Procesos inflamatorios.

Aparición de varices y pesadez de piernas.

Lesiones en la piel.

Esta reducción de la microcirculación puede ser causada por diversos factores, entre los que se encuentran:

Malos hábitos alimenticios.

Sobrepeso.

Falta de ejercicio.

Estrés acumulado.

Alteraciones derivadas de enfermedad, edad, factores congénitos…

La "JUREMA" (Mimosa tenuiflora, se usa en México, en la época prehispánica, el nombre de raíces náhualt, proviene de tepezcuahuitl, que significa “árbol del cerro que sangra” que llamaba la atención por sus múltiples beneficios. Este arbusto se utilizaba por los mayas desde hace más de 10 siglos como cura para enfermedades especialmente de la piel, como regenerativo celular. El árbol crece principalmente en clima cálido y húmedo, especialmente el bosque tropical, y en pastizales.

Contiene flavonoides, que disminuyen la permeabilidad capilar y protegen la piel del envejecimiento al incrementar la micro circulación, así como nutrientes como el zinc, hierro, cobre, manganeso y magnesio que desempeñan un importante papel en la reparación celular.

(Fuente:blogdefarmacia.com)

Opinión de expertos:

"Las venas de las piernas por el peso del cuerpo, la actividad que tienen y la presión con la que tienen que realizar su función, son susceptibles a sufrir dos tipos de bloqueos por coágulos: la flebitis o tromboflebitis, ocasionada por alguna vena superficial que se obstruye e inflama y la trombosis venosa profunda aguda, cuando algún coágulo tapa una arteria interna o a venas más profundas y grandes.

Este último problema es el más grave de los dos, porque puede causar tromboembolia pulmonar o cerebral o ataque al corazón, cuando un fragmento del coágulo se desplaza y penetra en el torrente sanguíneo llegando a estos órganos vitales y bloquea e impide la adecuada circulación e irrigación.

Los trombos son coágulos sanguíneos que se forman cuando la sangre pierde su estado normal líquido y generalmente son ocasionados por el estancamiento o mala circulación de la sangre, por lesiones en las paredes de las venas o por la presencia de sustancias que favorecen la coagulación sanguínea, que contribuyen a que los componentes de la sangre se depositen en las paredes de las venas en lugar de circular y la vayan obstruyendo.

La flebitis superficial casi siempre afecta a personas de edad avanzada o a las que han sufrido alguna lesión traumática o que tienen un período de inactividad prolongado.

Este problema se desarrolla por varios motivos, que tienen que ver con largos periodos de inactividad de las piernas que favorecen la formación de coágulos:
- Permanecer sentados durante periodos prolongados.
- Permanecer de pie durante periodos prolongados.
- Por trastornos relacionados con la coagulación de la sangre.
- Por sobre peso.
- Por un embarazo o aborto espontáneo.
- La insuficiencia cardiaca.
- Por padecer várices.
- Por padecer parálisis.
- Por padecer cáncer.
- Por una cirugía cuya recuperación requiere de mucho tiempo de reposo.

Otra de las causas en algunas mujeres, es el uso prolongado de pastillas anticonceptivas o productos que contengan estrógenos y el tabaquismo también aumenta el riesgo de padecer una trombosis venosa profunda". (Fuente: Dr. Juan Carlos Sariñana. Flebólogo. Hospital Ángeles del Pedregal.)